Château de Pibarnon Tinto 2020
Dominando el Mediterráneo desde su anfiteatro aterrazado, el Château de Pibarnon encarna la esencia de Bandol. Las viñas, aferradas a las laderas de marga azul de Santonion, se benefician de una exposición bien ventilada y de importantes variaciones de temperatura que prolongan la maduración. Esta geología única dota a los vinos de una gran profundidad de sabor, una marcada salinidad y una frescura estructural que la finca cultiva con inquebrantable dedicación mediante una crianza paciente y una búsqueda constante del equilibrio.
La añada 2020, bañada por el sol pero impecablemente conservada por las frescas noches, da como resultado un vino tinto denso y preciso. Las uvas se vendimian en su punto óptimo de madurez fenólica, se seleccionan cuidadosamente y se vinifican en depósitos con extracciones controladas para preservar la estructura de la fruta y el noble carácter de la Mourvèdre. Una crianza prolongada en grandes barricas de roble refina la estructura, suaviza los taninos y favorece la integración aromática sin una marcada influencia del roble. El embotellado se realiza tras varios meses de crianza sobre lías finas para conservar la jugosidad y el final salino típicos de esta denominación.
En nariz, se aprecian aromas de mora, arándano y cereza negra, acompañados de violeta, laurel, un toque de aceituna negra y especias dulces. Con la oxigenación, emergen notas de regaliz, cálida garriga, un matiz de cacao y un sutil toque ahumado. En boca, combina amplitud y precisión. Su entrada es plena, desplegando un paladar medio profundo y sedoso, sostenido por taninos firmes pero perfectamente maduros. Su estructura calcárea y rica en yodo aporta ligereza al vino y se prolonga en un final largo y sabroso con notas de regaliz, pimienta negra, ralladura de naranja sanguina y una salinidad característica de los suelos de marga azul.
En la mesa, este Bandol tinto marida a la perfección con paletilla de cordero confitada al romero, costillar de cordero con costra de hierbas, costillar de ternera a la parrilla, pato asado o, una vez que el vino haya envejecido, un estofado de liebre. Platos del sur de Francia, como el tian de verduras, la tapenade, la berenjena asada y los quesos curados de oveja, realzan su profundidad sin eclipsar su frescura. Se recomienda decantarlo cuando es joven y servirlo a unos 16 grados centígrados.
Variedades de uva: Predominantemente Mourvèdre, complementada con Garnacha