Adquirido en 1960 por el Sr. Alain Giraud, Château Grand Corbin pasó luego a su hijo Philippe hasta que la finca fue adquirida por el grupo MBTP (Mutuelle du Bâtiment et des Travaux Publics) en 2011. En 2012, al final de la en la nueva clasificación de Saint-Emilion, su vecino, Château Haut-Corbin, obtuvo el mismo rango que Grand Corbin. Así decidieron unirse las dos fincas contiguas, situadas a tiro de piedra de la denominación Pomerol. Desde la cosecha de 2012, los Châteaux Haut-Corbin y Grand Corbin se han convertido en uno y llevan el nombre de Château Grand-Corbin. Philippe Dambrine está ahora a la cabeza del castillo. Se cuida con esmero el trabajo de la viña y se realizan cosechas en verde durante el verano. A la vendimia manual le sigue una rigurosa selección antes de las operaciones de vinificación, que se realizan en una sala de tinas construida en 2002, a la vanguardia de la tecnología porque fue diseñada según el concepto de "gravedad". La crianza, en la que el vino de prensa y el vino de crianza se crían por separado, dura de 13 a 18 meses en barricas renovadas por tercios cada año. El embotellado sigue a las tradicionales operaciones de clarificación, pero sin filtración. Merlot, la principal variedad de uva, le confiere redondez y equilibrio, mientras que la alta proporción de Cabernet Franc presente en el coupage le confiere, como su vecina Figeac, un frutado rico y concentrado. Château Grand Corbin produce vinos de gran delicadeza, para degustar dentro de los diez años posteriores a la vendimia.