El Valle de las Abejas - Collioure Blanco 2024
Collioure Blanco 2024 de El Valle de las Abejas es una interpretación luminosa y sensible de los grandes blancos de la Costa Vermella, moldeada por el mar, el viento y la roca. El color amarillo pálido con reflejos dorados anuncia un vino a la vez solar y tenso. La nariz se abre con aromas de cítricos maduros, limón confitado y melocotón blanco, complementados por notas de flores blancas y un toque de almendra fresca. Un matiz salino, casi yodado, recuerda inmediatamente la proximidad del Mediterráneo y las terrazas abruptas de esquistos. El conjunto se muestra preciso, elegante, sin pesadez, con una aromática pura y expresiva. Desde la olfacción, el vino impone una sensación de equilibrio y profundidad tranquila.
En boca, el ataque es amplio pero perfectamente controlado, sostenido por una materia sedosa y una frescura natural que estructura el conjunto. Los sabores de frutas de pulpa blanca se prolongan con notas de cáscara de cítrico, piedra caliente y un ligero toque floral. La textura, a la vez generosa y tensa, refleja el trabajo preciso en la viña y en la bodega, privilegiando la expresión del terruño más que la opulencia. La crianza, finamente integrada, aporta relieve sin ocultar la identidad del vino. La boca permanece larga, equilibrada, con una tensión salina que alarga el final y refuerza la bebibilidad. Cada sorbo expresa el encuentro entre la potencia del sol y la frescura del viento marino.
Collioure Blanco 2024 se inscribe en la misma filosofía que las otras cuvées de El Valle de las Abejas, nacida del encuentro entre Pierre Gagnaire, Thierry y Jean-Emmanuel Parcé, y Rodolphe, en torno a una visión común basada en el respeto, la escucha y el tiempo largo. Es un vino de mesa gastronómico, ideal para acompañar pescados a la parrilla, crustáceos, una cocina mediterránea refinada o platos con acentos yodados. También se disfruta muy bien solo, en un momento de calma, para apreciar plenamente su profundidad y finura. Servido alrededor de 10 a 12 °C, revela toda su complejidad aromática y su frescura. Es un gran blanco de Collioure, a la vez sincero, preciso y profundamente arraigado en su paisaje.
Variedades: Garnacha Blanca, Garnacha Gris.